Un cielo azul tan grande que me aplasta. El bus avanza y en mis cascos suena la voz de Daniel Johnston. Al igual que sonó en esa habitación 409 la voz de ella. ¿Existió de verdad ? ¿Fue algo en mi cabeza cual mecanismo defensivo que me salvara ?.
Cuando me pregunten, no dire tu nombre, haz tu lo mismo y asi esta historia sera solo nuestra.
En mi bolso encuentro la foto que me ella me hizo, como el que sueña con un angel y al despertar tiene una pluma a su lado.
Madrid, espérame ahí, no te muevas.
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